Especie de roedor de cola corta de la Cordillera de Los Andes que se encuentra gravemente amenazada debido a la caza indiscriminada por su fina, densa y lujosa piel.
Se caracteriza por unas patas traseras mas largas y potentes que las delanteras, un cuerpo de entre 22 y 38 cm de longitud, un peso de entre 500 y 800 gramos y un cuello y unos hombros fuertes que le permiten saltar y trepar.
Es un animal estrictamente hervívoro que en condiciones naturales vive en colonias, construyendo sus madrigueras sobre roca o sobre el suelo y pare entre una y dos crías por camada. 

 María Belén Riesen